Alejandro vive en un mundo habitado por la música. Él mira el mundo en clave musical. Sus cuadros reflejan ese movimiento. Este cuadro con sus grises y celestes me remiten a un cielo en calma, un cielo que invita a la reflexión. Las estelas blancas son sus frecuentes ráfagas de sonidos que invitan a detenerse en un no lugar, un no tiempo que creo que es ese espacio reservado para el arte. Aquel que nos salva...aquel que nos dice que la realidad no está solo en lo que vemos...hay otra realidad y es en ella que Alejandro nos invita a habitar.
Juarroz es un poeta de esencia. Del ser despojado. Los cuadros de Alejandro comparten el mismo universo estético. Contemplar este cuadro y leer el poema que le sigue es volar por ese mundo.
+de+FOTOS+ARI+315.JPG)
Sólo la música
puede ocupar el lugar del pensamiento.
O su nolugar,
su autoespacio vacío,
su vacío lleno.
El pensamiento es otra música.
Y sólo el pensamiento
puede ocupar a su vez el lugar de la música
e infiltrarse como ella
en el extremo más distante de lo que existe,
como un casi animal tan consecuentemente fino
que puede llegar hasta ese punto
donde el ser deja de ser el ser
para ser algo más que el ser.
Roberto Juarroz
Poesía Vertical II
No hay comentarios:
Publicar un comentario